Me uno a ese clamor popular que está cundiendo cada vez más para que den a Iker Casillas el balón de oro. Creo que se lo merece con creces; si no hubiera estado él, difícilmente hubiéramos ganado estas dos eurocopas y este mundial. Y me alegraría mucho más de que se lo dieran a él porque se lo llevara una persona con su enorme calidad humana.
Precisamente por eso, por ser tan buena gente además de tan gran portero, es por lo que le dediqué mi último libro " Teatro del futuro para reír en el presente" que saldrá ahora en unos días. Os dejo la dedicatoria que le hice. Como veréis no hago mención a su triunfo en la Eurocopa porque ya estaba enviado a edición antes de que comenzara.
DEDICATORIA
A Iker Casillas
Tenía muchas ganas de hacer esta dedicatoria porque, como ya he dicho otras veces, me gusta mucho el fútbol, he sido futbolista y el fútbol tiene mucha trascendencia en el devenir de esta sociedad, por lo que considero que es muy importante que haya gente que se signifique por sus valores, que haya gente que marque el rumbo adecuado a seguir, que haya gente que "desborreguice" o por lo menos contribuya a "desborreguizar" este deporte. Y uno de esos personajes es sin duda Iker Casillas. Admiro mucho a Iker como futbolista -yo también fui portero, como él- pero sobre todo lo admiro como persona. Es muy difícil que un tipo que ha llegado donde ha llegado él, se mantenga tan sencillo, tan humilde, tan natural, tan "buena gente" como es él. Con la edad muchos nos vamos dando cuenta de que, por encima de cualquier logro, lo más importante en esta vida es ser una buena persona. Iker lo entendió así desde que era un crio y lo sigue entendiendo a pesar de haberlo conseguido todo.
Es muy saludable para la sociedad que haya espejos como él donde mirarse los niños. Es uno de esos ejemplares que, desde su parcela, contribuyen a que este mundo sea un poco mejor. Es la clara evidencia de que, siendo tan buena persona, también se pueden alcanzar grandes metas. Y, siendo así, llegar a la cima es mucho más satisfactorio, porque ves como todo el mundo se alegra de que hayas llegado, como pasa con él.
Gracias por ser como eres, Iker. Por favor...¡no cambies nunca! Y enhorabuena por ser el jugador con más partidos internacionales. Rara vez un record habrá estado en tan buenas manos.
José Cedena