Pocholo, el bufón, se lo está pasando en grande, tocando su flauta, cual flautista de Hamelin, a lo largo del precioso paseo que bordea el río Tajo. Sólo que a éste, en vez de ratas, las que le siguen son “cacatúas”. Bartolillo por fin ha conseguido escabullirse de la reina Sofea, que ahora persigue al otro. Ahí vemos al juglar escondido detrás de los troncos que rodean el paseo, temeroso de ser visto. Olvido, a lo lejos, también lo tiene todo controlado.

Bufón copia